miércoles, 1 de marzo de 2006

Ruidos Molestos



Parto con una pregunta. ¿qué es más espectacular que estar happy con cerveza, estar escuchando a The Mars Volta a todo chancho y más encima cantar encima y bailar al ritmo de esa música psicotrópica? muchos dirán: cagar, fumar, culiar, o muchas barvaridades de este tipo, pero no, la suma de factores antes dichos son lo mejor. Pero que pasa cuando uno junta todos esos elementos a las 3:00 am, en una casa pareada a la de un vecino hijo de puta? El vecino toma su teléfono, marca el 133 y llama a esos personajes de verde que son tan agradables verlos cuando uno está en alguna parte hostil y flaite de la capital, pero a la vez tan desagradables cuando uno hace una fiesta en su casa. Cuento corto, dos carabineros uno flaco que no tenía más edad que yo y uno gordo que lo que menos tenía era simpatía, golpearon mi puerta, me pidieron el carnet, y me hicieron una flamamte citación, en flamante papel bond de bajo gramaje, en flamante tinta negra de lápiz Bic, mientras yo y mis amigos reclamábamos que no podía hacer eso sin antes llamarnos la atención. El paco gordito, dentro del poder que le otorga su traje verde debió estar feliz, porque nosotros nada podíamos hacer ante el poder que ejercía sobre nosotros, y con una risa sarcástica me entregó la citación y se fue un su flamante auto policial. Es increible como uno puede pasar de la euforia de mars volta a la rabia por la culpa de un vecino ameno y un paco simpático.